No sólo de aciertos vive el hombre

     Si en la entrada anterior repasamos los aciertos de la última hornada ahora vienen los contras, piezas que, normalmente por errores propios durante la fabricación de las piezas, el esmaltado, la propia cocción  y demás variables quedan inservibles o bastante mermadas en el último momento. 

Para empezar con el desastre vamos con esta pieza: 

     A primera vista puede resultar llamativa, pues bien . . . se trata de un error con todas las letras, el esmaltado puede resultar "interesante" de no ser porque se ha producido de una forma accidenta, esas "islas" sin esmaltar que se aprecian son fruto de un defecto en el esmaltado, cuando se aplica demasiada capa de esmalte (normalmente debemos jugar entre 1mm y 2mm de espesor) este tiende a agruparse fuera de las zonas más densas formando estas "calvas" en la superficie, en ocasiones puede resultar un buen recurso estético pero este no era el caso, así que tirón de orejas para mi. Lo único que nos podemos quedar de bueno con esta pieza es que debo volver a usar este esmalte, con una capa más pequeña para evitar esas islas y ese "chorreo" del esmalte, pero la verdad es que el esmalte en si es bastante interesante (el problema es el esmaltador jejejej: 

     Cuando la capa de esmalte es más gruesa de lo que ese esmalte requiere (cada esmalte tiene su capa óptima y en función de esta mostrará unas cualidades u otras en menor o mayor medida) el esmalte suele "chorrearse" como en este caso: 

    El problema de este "chorreo" del esmalte es que deteriora tanto la pieza como las placas que empleamos para la cocción en el horno, y es que el esmalte fundido por la alta temperatura  tocar la placa y la maceta al mismo tiempo en los momentos de mayor dilatación de la piezas, hasta aquí todo bien . ..  el problema viene cuando llega la hora de pasar a enfriarse. La pieza de gres vuelve a encoger, pero la placa permanece prácticamente inalterable, a su vez el esmalte ha dejado pegada la pieza a la placa en el momento de mayor dilatación con lo cual al encojer hace que se parta la pieza o el esmalte como podemos ver en la esquina derecha de la foto superior, también hubo un problema con los grosores del esmaltado: 

     No obstante el esmaltado resulta bastante interesante, habrá que repetirlo y espero que la próxima vez pueda pasar al apartado de "aciertos". 

     La tónica de errores ha sido la misma, y es que el probar esmaltes nuevos a altas temperaturas (1280 Cº) trae este tipo de problemas: 

  

     Como podéis ver en esta pieza el esmalte también ha "chorreado" hacia la parte inferior, pegando las patas a la placa base, aunque esta vez no ha roto la estructura básica si ha despostillado la base de las patas, aunque siendo una bandeja para empezar un bosque de robles de unos 35 cm seguirá sirviéndome y trataré de hacerlo mejor en la maceta definitiva. 

     La próxima vez habrá que colocar las piezas esmaltadas con este esmalte crema en las zonas del horno donde se acumulan menos calor para evitar estos problemas (a parte de corregir defectos en la capa de esmaltado) pues puede haber diferencias de hasta 10 Cº entre la zona inferior y superior del horno, dato bastante relevante teniendo en cuenta que no todos los esmaltes alcanzan su punto óptimo de cocción a una temperatura idéntica. 

     Pues bien, ya se ha hecho el diagnóstico, evaluado los daños, causas y posibles soluciones, ahora solo falta anotarlo a fuego en la cabeza para tratar de no cometer los mismos errores y perfeccionar estos aspectos. Estos son los errores de los cuales me he dado cuenta, seguro que hay otros que no y es ahí donde agradecería cualquier aportación . . . 4 ojos ven más que 2. 

     Saludos y en la próxima habrá que hacerlo mejor.